Sardinas rellenas de pimiento

Lave, corte y pique los pimientos, quitándoles anteriormente las simientes y los trocitos blancos. Póngalos en una sartén con los 100 g de mantequilla. Rehóguelos muy bien y déjelos al calor en espera.

Quite las espinas de las sardinas. Lávelas, séquelas y sálelas ligeramente. En el centro de cada sardina, introduzca un poco de pimiento, y ciérrelas bien.

En una fuente resistente al horno, vierta las cuatro cucharadas de aceite, de modo que cubran todo el fondo de la fuente. Coloque las sardinas unas junto a otras.

Espolvoree con el pan rallado y ponga la mantequilla reservada en trocitos.

Introduzcalas en el horno previamente calentado y a temperatura media durante unos 15 minutos. Sírvalas en seguida.