Tarta de requesón

En primer lugar preparamos la pastaflora para la base mezclando, con unas varillas, la mantequilla y el azúcar. A continuación agregamos el huevo y la vainilla y una vez que esté bien integrado vamos incorporando la harina; espolvoreamos con un poco de harina la encimera o mesa de trabajo y amasamos la pasta dándole forma de bola. La dejamos reposar en un bol, unos 20 minutos, tapada con un paño.

Mientras vamos preparando la crema de la tarta. Separamos las yemas de las claras y batimos estas a punto de nieve con una pizca de sal y reservamos. Batimos, en un bol grande, las yemas con el azúcar hasta obtener espuma y un color blanquecino y reservamos.

Ponemos en el vaso de la batidora el requesón, el yogur y el preparado para natillas, batimos hasta que quede una crema uniforme y lo añadimos al bol de las yemas, mezclamos con unas varillas e incorporamos las claras con suavidad, girándo las varillas de abajo a arriba.

Extendemos la pastaflora con un rodillo y la ponemos en el fondo de un molde desmontable, a poder ser de 28 cm. de diámetro. Vertemos encima la crema, repartimos uniformemente y metemos en el horno, precalentado a 160°-170°, entre 75 y 90 minutos. Está en su punto cuando al pincharla la aguja sale limpia.

La sacamos del horno y dejamos que se enfríe un poco en el molde. Después desmoldamos sobre una rejilla retirando solo la base del molde. Cuando se enfríe totalmente se desmolda por completo sobre una bandeja.